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L’animo spinge a narrare di forme che in corpi diversi
mutano, 2024
Maria Cristina Finucci
El trabajo de Maria Cristina Finucci aborda un tema profundo y urgente: el destino de los objetos de plástico y su transformación en un contexto ambiental devastado por la cultura del consumo y el daño ecológico. La idea de simbolizar el plástico como una especie de “vida” que sufre una metamorfosis y luego renace en una forma diferente, a través de la intervención tecnológica, es una reflexión no solo sobre las consecuencias de la contaminación, sino también sobre las posibilidades de recuperación y regeneración.
Finucci sugiere que, a pesar de la destrucción y dispersión de los objetos en el mar, estos fragmentos pueden de alguna manera ser “reorganizados” y convertirse en parte de un nuevo ciclo. El uso de la inteligencia artificial para simular esta transformación visual ofrece una interpretación artística del proceso, donde los objetos, aunque pierden su forma original, no pierden completamente su identidad. Estos fragmentos “híbridos” ya no son reconocibles, pero a través de la realidad aumentada, la artista logra recuperar la memoria de su vida anterior, permitiendo al público redescubrir el objeto original, su “vida pasada”.
La idea de una “resurrección” del objeto, que regresa a la vida en una forma diferente, plantea preguntas filosóficas y ecológicas profundas. ¿Qué significa para un objeto ser “resucitado”? ¿Puede un objeto de plástico, símbolo del consumismo y de la cultura de usar y tirar, tener un “sentimiento” de pertenencia a un ciclo natural más amplio una vez transformado? Finucci, con su visión, parece sugerir que, al igual que los seres humanos estamos intrínsecamente ligados a los ciclos naturales y a las experiencias colectivas, incluso estos objetos –aunque creados para ser desechados– puedan, de alguna manera, renacer y adquirir un nuevo significado a través del arte y la tecnología.
El hecho de que cada fragmento del objeto sea recompuesto en una nueva forma y ya no sea reconocible implica un cambio profundo de identidad. Pero la memoria del objeto original, que emerge a través de la aplicación de realidad aumentada, es una forma de mantener vivo el vínculo con el pasado, un llamado a reflexionar sobre el valor de cada objeto individual y su impacto en el medio ambiente y la sociedad.
De este modo, la obra de Finucci no solo pone de manifiesto el problema del plástico en el medio ambiente, sino que también invita a repensar nuestra relación con el mundo material, nuestra capacidad de recuperación y, sobre todo, la memoria histórica que podemos preservar y transformar, incluso a través de la tecnología.